Muchas de las empresas más exitosas tienen la innovación en su núcleo. Considere Apple, Amazon, Netflix y Uber. Sus fundadores revolucionaron las industrias al ver el cambio como una oportunidad en lugar de una amenaza.
Pero la innovación no necesita venir de arriba hacia abajo. De hecho, no debería. Cuando innova solo con ideas que provienen de los líderes, envía a los empleados la señal de que no es su trabajo encontrar nuevas soluciones y, como resultado, pierde oportunidades.
En muchos casos, los empleados son la mejor fuente de ideas porque suelen estar más cerca del cliente. Cuando sus ideas son escuchadas y puestas en práctica, tienen el potencial de darle a su empresa una ventaja competitiva.
Muchas organizaciones se dieron cuenta de la importancia de la innovación de los empleados durante la pandemia. Según una encuesta realizada por Harvard Business Review (HBR) Analytic Services , solo el 40% de las organizaciones dijeron que la innovación fue impulsada por igual entre los empleados y el liderazgo senior antes de COVID. En el futuro, el 54 % de las organizaciones espera que la innovación sea igual en ambos niveles.
Sin embargo, la innovación no ocurre en el vacío. Los líderes deben preparar el escenario creando un lugar de trabajo que alimente y nutra la creatividad mediante la adopción de estas tres mejores prácticas.
Empoderar a los empleados
Cuando los equipos cambiaron a arreglos de trabajo remoto durante la pandemia, los gerentes descubrieron que las personas trabajan bien con autonomía. Una estrategia operativa que empodera a los empleados con formas flexibles de diseñar y ejecutar su trabajo, crea un entorno en el que los equipos pueden ser más productivos. El poder de controlar las prácticas y los resultados también ayuda a los empleados a encontrar más significado en su trabajo, y los equipos que tienen flexibilidad y agilidad, ayudan a generar mejores resultados.
Sin embargo, los equipos autónomos no surgen por casualidad. Las organizaciones necesitan proporcionar recursos que ayuden a los empleados a desarrollar y ejecutar ideas. Para hacerlo, los empleados necesitan herramientas que proporcionen visibilidad, impulsen la responsabilidad y faciliten la colaboración. Un centro centralizado se convierte en una plataforma para compartir información y encontrar recursos que pueden ayudar con la ideación.
Según la encuesta de HBR , el 61 % de las organizaciones dijo que su liderazgo confió a los equipos la innovación en función de sus propias necesidades específicas antes de la pandemia. En el futuro, el 71% espera que su liderazgo confíe cada vez más a sus equipos la innovación.
Cambia tu cultura
Empoderar a los empleados es una cosa; proporcionarles una sensación de seguridad psicológica para fomentar la asunción de riesgos y hablar es otra. Las organizaciones que crean una cultura de innovación dejan claro que el fracaso no es algo para temer o desalentar. El CEO de Tesla, Elon Musk, dijo una vez: “El fracaso es una opción aquí. Si las cosas no están fallando, no estás innovando lo suficiente”. Y cuando surge una idea innovadora, los empleados deben ser reconocidos y recompensados por sus esfuerzos.
Un ejemplo de empresa que ha creado una cultura de innovación es Convergint. Convergint, el integrador de seguridad privado más grande, aprovecha Smartsheet para impulsar la creatividad y la toma de decisiones.
“Nuestra cultura nos permite ser creativos y adoptar nuevas herramientas y hacer que la organización también las use, ayudando no solo a nuestros clientes sino también a nuestros colegas y comunidades”, dice Scott Gandolfe, director de administración de programas en Convergint . “Esa cultura estimula nuestro uso de Smartsheet, que llena perfectamente muchos de los vacíos con una herramienta que es flexible y adaptable. Mi equipo puede crear cosas asombrosas que, si no tuviéramos Smartsheet, estaríamos haciendo manualmente”.
Esté dispuesto a actualizar sus prácticas
La innovación no debe limitarse a una práctica orientada al cliente. Los cambios internos pueden conducir a mejores flujos de trabajo que crean organizaciones ágiles. Considere que la mayoría de los empleados trabajaban en oficinas hace un año y medio. Hoy, y el 69% de las empresas cree que la mayoría de sus empleados ahora pueden trabajar de manera efectiva en entornos remotos y distribuidos.
Actualizar las prácticas desde un enfoque de "siempre lo hemos hecho de esta manera" a un entorno fluido y dispuesto a experimentar contribuye a una mentalidad innovadora. Convergint descubrió que un impulsor clave de las nuevas soluciones es tener una plataforma de gestión de proyectos fácil de usar como Smartsheet. La empresa realiza llamadas quincenales de capacitación e intercambio de conocimientos sobre su uso.
“No le decimos a la gente cómo deben usarlo, pero les permitimos ser creativos, y eso les permite a las personas resolver problemas que ni siquiera sabíamos que teníamos”, dice Gandolfe. Su equipo ahora disfruta de una mejor comunicación, conocimientos más claros y una mayor responsabilidad por los procesos internos.
En la encuesta de HBR , el 80 % de las empresas encuestadas estuvo de acuerdo en que los empleados ágiles e innovadores, desempeñaron un papel importante para garantizar la continuidad y el éxito del negocio durante la pandemia. Al crear una cultura de innovación, las empresas estarán mejor equipadas para capear la próxima disrupción y responder a las necesidades de un mercado en constante cambio.
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